Un juninense de 34 años, carpintero y atleta, fue detenido ayer por el homicidio de María Mónica Parola, ocurrido el sábado pasado, en calle Mayor López 367 de nuestra ciudad.
A raíz del trabajo desplegado por la Delegación Departamental de Investigaciones (DDI) de Junín, y utilizando las cámaras privadas de seguridad más otras tareas investigativas, se llegó a dar con este sujeto que está imputado por homicidio calificado.
Según está previsto, durante el transcurso de la mañana prestará declaración ante la fiscal que atiende el caso, la Dra. Vanina Lisazo, del Departamento Judicial de Junín.
EL CASO
María Mónica Parola, de 51 años, es la víctima de un nuevo femicidio ocurrido en Junín. Su cuerpo sin vida fue hallado en su vivienda.
Se sabe que alguien ingresó a la casa de la mujer y podría haber sido el autor del golpe mortal que sufrió en el cráneo. Así es como también se analizaron las comunicaciones a través de las torres de telefonía celular, a partir de informes solicitados desde la Fiscalía, y se aguardaron datos sobre la toma de huellas en el interior de la vivienda, que estuvo a cargo de personal de la Policía Científica.
La última que vio con vida a María Mónica Parola fue una mujer que la ayudaba con las tareas domésticas, el viernes pasado. Cuando el lunes retornó al domicilio de Mayor López 367 para cumplir con su trabajo, ante la falta de respuesta a sus llamados, decidió dar aviso a la policía.
Así es como se encontró a la víctima, en su habitación, tirada boca abajo con una botella de alcohol rota a su lado. Dado el testimonio recogido entre vecinos que daban cuenta de su adicción, en principio los investigadores sospecharon que se trató de una muerte natural, pero el panorama comenzó a cambiar cuando se descubrió que presentaba golpes en el cráneo -fue clave la autopsia-, que serían los que le causaron la muerte. Incluso, se presume que podría haber permanecido algunas horas agonizando.
Cuando fue encontrada ya sin vida, Parola tenía encima 150 mil pesos y en la casa había 200 dólares y una notebook, entre otros elementos de valor, y no había nada revuelto ni desordenado, tal como suele suceder en escenarios de robo.
