La nafta común pasó de $944 a $988, mientras que la premium Infinia saltó de $1127 a $1180.
El domingo nuevamente se dio un escenario común en Junín: largas filas para cargar los tanques se repitieron ante un nuevo aumento de la nafta, esta vez por la actualización de los impuestos al combustible líquido (ICL) y al dióxido de carbono (IDC).
Abril, que tendrá un festival de aumentos, comenzó con un incremento de, al menos, un 4,3% en los combustibles, por lo que el litro de nafta súper pasó a costar 834 pesos en la Ciudad de Buenos Aires; en el Conurbano, por ejemplo, el precio es un 10 por ciento más alto.
En Junín, tomando como referencia los valores de YPF, la común pasó de $944 a $988, mientras que la premium Infinia saltó de $1127 a $1180.
Este último incremento se suma a recientes ajustes como el de alrededor del 7,5% en marzo, 6% a principios de febrero, el 38% en diciembre y otro del 27% en enero. En total, los combustibles acumularon un 106% desde diciembre 2023.
Tras la devaluación del 55 por ciento del peso en diciembre y la “liberación de precios” puesta en marcha por el gobierno de Javier Milei, la nafta acumula un aumento del 106 por ciento en menos de cuatro meses y hay un incremento más planificado para principio de mayo. Además, las petroleras podrían sumar un incremento del 2 por ciento correspondiente al deslizamiento del dólar oficial.