Masiva movilización por las calles céntricas y concentración en la plaza 25 de Mayo.

Miles de vecinos y trabajadores marcharon por las calles céntricas al grito de “La patria no se vende”, y la manifestación culminó en la plaza 25 de Mayo, donde se leyó un duro comunicado que decía lo siguiente:
“Este 24 de enero es de todos y todas los trabajadores y trabajadoras ocupados, desocupados y de la economía popular, de los jubilados, de los estudiantes, de los movimientos sociales, de los hombres y mujeres de la cultura, de la ciencia, de los profesionales, de los pequeños y medianos empresarios y productores, de los sacerdotes de nuestros barrios populares y de todos los habitantes del pueblo de la Nación Argentina.
Sin una razón valedera, pretenden imponer a “todo o nada” un DNU que la Justicia laboral ha detenido y una ley ómnibus que no puede debatirse contrarreloj por la incontable cantidad de materias que abarca.
Las sociedades se transforman con diálogo y consenso, en cada sector social, económico y productivo, hay interlocutores legítimos para ofrecer opiniones valederas. No se puede imponer un cambio de semejante envergadura y de tan variada temática en plazos perentorios bajo amenaza de sufrir consecuencias económicas más severas aún.
Algunos puntos graves de la ley ómnibus y el DNU son:
-Autoriza privatizaciones de empresas estratégicas.
-Libera los precios de los alimentos, combustibles y energía.
-Elimina la fórmula de movilidad jubilatoria y malvende el Fondo de Garantía de Sustentabilidad.
-Modifica la ley de pesca para abrir el Mar Argentino a la explotación de empresas extranjeras sin control.
-Libera la exportación de hidrocarburos sin necesidad de abastecer el mercado interno.
-Eliminación de la ley de alquileres.
-Criminaliza la protesta sindical y social, la considera delito penal y causal de despido justificado.
-Delega la suma del poder público al Poder Ejecutivo, prácticamente suprime al Congreso.

Las medidas antes mencionadas nos afectan a todas y todos, porque nadie va a cuidar que las empresas pongan los precios que más ganancia le generen. Nuestros abuelos y abuelas van a depender de la buena voluntad del gobierno para percibir un aumento, cualquier extranjero va a hacer lo que quiera con nuestro país y sus recursos. Si te quejás y protestas por las condiciones de trabajo, te van a poder despedir justificadamente, nadie va a ayudarte porque si los propietarios se exceden en las condiciones que ponen, si podés alquilás, sino búscate otro.
Los derechos civiles, sociales y laborales no se compran ni se venden, ni se imponen, los derechos se conquistan y se defienden.
Es necesario reemplazar la grieta por la unidad nacional, reafirmando que la patria es de todos y no se vende!!! Que el ajuste lo paguen los poderosos.
Gracias a todas y cada una de las personas que hoy estamos en esta plaza, gracias a la solidaridad internacional por su apoyo permanente.
Estamos hoy acá porque creemos en un país con justicia social”.