En un acto con mucho marketing, finalmente la nueva terminal “Mario Andrés Meoni” quedó oficialmente habilitada. Lleva el nombre de quien ideara este traslado a un punto neurálgico de la ciudad, y que pusiera en marcha su construcción mientras ocupó el cargo de intendente.
Su sucesor, Pablo Petrecca, necesitó diez años para finalmente ponerla en marcha. Algo que sucedió ayer por la tarde, cuando las dependencias de la avenida de Circunvalación quedaran oficialmente habilitadas para su funcionamiento. Justo unos meses antes que el intendente cumpla con su década al frente del municipio y se vaya persiguiendo otros horizontes.
El acto, con mucha pompa, tuvo un gran acierto: contó con la presencia de Laura Oliva y Robertino y Felipe Meoni, la familia de quien fue el ideólogo de este proyecto.
Ahora habrá que ver cómo se logra el desarrollo diario de una terminal que, a pesar de los años transcurridos, fue concesionada con apuro por el gobierno municipal. Que entregó 380 millones (más de la friolera incalculable que llevó con tantos años de ejecución) a una empresa privada para que la administre y explote un área paralela de “shopping”.
Lo cierto es que la conocida terminal céntrica dejará de ser el paisaje que todos conocemos. Sin más micros que la poblaron desde que arrancó, allá por abril de 1964, y se transformó en el escenario de tantas historias juninenses y zonales. Un papel que ahora se trasladó a la avenida de Circunvalación, por los nuevos tiempos que llegaron.
