Dos hechos preocupantes de robos desataron la furia de los vecinos de este paquete sector ubicado a la vera del camino a la Laguna. Pero los delitos azotan toda la ciudad.
Después del impacto que tuvo el robo, privación ilegal de la libertad y golpes que sufrió un matrimonio que habita en el barrio privado Costa Verde, llegó la noticia de otro hecho, que se dio cuando los propietarios no se hallaban en la ciudad y fue descubierto varios días después, aunque se presume que los dos ilícitos tuvieron lugar casi en simultáneo.
Los propietarios de este paquete barrio ubicado en cercanías al camino a la Laguna pusieron el grito en el cielo y el mismo sábado por la tarde mantuvieron una reunión, con los responsables de la seguridad privada del lugar y con funcionarios policiales y municipales.
En primer lugar, había trascendido el robo perpetrado al matrimonio conformado por el hijo de un empresario transportista de apellido Morillo y una funcionaria judicial que se desempeña en una Ayudantía Fiscal en Alem. Resultaron tomados por asaltos mientras descansaban por tres individuos encapuchados, que encerraron a la mujer en el baño mientras golpeaban al hombre para exigirle dinero.
Según se supo, se dieron a la fuga sin ser todavía identificados, con un botín de varios millones en pesos, dólares y joyas.
El segundo hecho fue un “escruche”: sus propietarios no estaban presentes. En este caso, la víctima fue Agustina Decarre, profesional que preside la Federación de Asociaciones de Productores Asesores de Seguros de Argentina.
Los malvivientes –se presume que fueron los mismos autores del primer robo conocido- le desvalijaron la casa: se llevaron dinero, joyas, electrodomésticos y elementos de tecnología.
Al conocerse esta situación, los vecinos organizaron una reunión de emergencia para reclamar medidas de seguridad, aunque por ahora no trascendieron los resultados.
EN TODO JUNIN
La inseguridad golpea a toda la ciudad, solo que hizo más ruido cuando sucedió en este barrio privado. Pero los casos de robos y escruches se multiplican por todos los barrios, según se sabe aunque se escondan bajo la alfombra.
Entre los últimos hechos, se cuenta el millonario robo en la casa de una estudiante, ubicada sobre calle Paraguay. Cuando no se hallaba presente, delincuentes ingresaron y se alzaron con más de 40 millones de pesos, además de ropa y elementos de tecnología.
También hubo una “visita” a una vivienda situada en Edison al 300.
Y se suma el accionar de los motochorros, que le arrebataron la cartera con documentos, dinero y teléfono a una joven que transitaba por el barrio San Francisco.
